La seguridad es uno de los pilares del HSBC Zero. Utiliza tecnología contactless, que reduce el riesgo de clonación y facilita compras rápidas. Además, la tarjeta cuenta con monitoreo constante para identificar y prevenir transacciones sospechosas, garantizando protección activa contra fraudes.
Otro diferencial es el soporte inmediato en caso de pérdida o robo. HSBC ofrece atención 24/7 para bloquear y reemplazar la tarjeta, minimizando pérdidas y molestias. Este enfoque refuerza el compromiso del banco con la tranquilidad de sus clientes.
Como parte de uno de los bancos más grandes del mundo, la tarjeta HSBC Zero hereda la solidez de una institución confiable. Esta infraestructura global, junto con políticas de seguridad rigurosas, ofrece una experiencia financiera segura y confiable, esencial para el mercado moderno.